Dos pasos hacia adelante, uno hacia atrás
- Diana Sotelo
- 21 abr 2016
- 1 Min. de lectura
Esta historia es personal y, sin embargo, me atreví a compartirla por el deseo de mostrar al mundo lo que vive un grupo de niños reales cuando están en secundaria; actualmente comparto mensajes y vistas con cada uno de mis amigos de esa época, quizá por la historia que nos une y que nos hizo aún más cercanos.
Siempre te llevo en la mente Valeria, desde donde estés, te agradezco por darme a esos hermanos que están cuando los necesito. Te extraño, hoy y siempre.




Comentarios